Dos pollas entrando en mi garganta, mis tetas apretadas al máximo, haciendo que la leche manara sin cesar, mis lagrimas corría por mi rostro y mi nariz era mi única vía posible para respirar. Cogida por las manos, cogida por los pies y sentí que entraba una gran polla por mi culo, desgarrándome analmente.
Al
sacar esas enormes pollas de mi boca pude volver a respirar, pero los dedos apretando
mis glúteos, entrando esa enorme polla en mi culo conseguía que no dejara de
llorar, mientras apretaba con fuerza mis dientes.
Eva
Green sonreía al ver ese espectáculo carnal, de como era violada por su horda
de seres de las mazmorras, por sus orcos, mientras que mi cuerpo se cubría de
sudor.
Respire
con tranquilidad cuando esa enorme polla salió de mi ano, satisfacción al salir
cada uno de sus centímetros. Me dieron la vuelta y me tumbaron en el frio
suelo, se pusieron en cola para ser follada por cada uno de ellos. Yo no podía
moverme ya que estaba agotada, levantando con dificultad mis carnosos muslos,
mi sudor cubría mis lubricadas carnes. Haciendo que mis senos se movieran como
flanes.
Con
brutalidad uno de ellos me cogió de las caderas y sentí como me penetraba con
esa enorme polla llena de venas, cerré los dientes con fuerza por la presión,
por el dolor, era increíble como mi coño se estiraba para que entrara ese trozo
de carne mas duro que un canto. Ese pollazo verde golpeaba mi útero sin cesar.
Sentí
como se marcaba esa enorme polla en mi ombligo, yo no podía mas y la cola
continuaba, el sexo salvaje no paraba y agotada me dejé llevar sabiendo que si
los saciaba ellos me dejarían.
Una
polla en cada mano me metía una o otra en la boca, para las felaciones
recordaba como lo hacían las actrices porno y lo comencé hacer genial, pero en
nivel extremo de pollas gigantes. Mientras que uno me penetraba analmente y
otro vaginalmente.
Tirada
en el suelo con espasmos de agotamiento, ya no podía con mi cuerpo, con mi
exuberante y adictivo cuerpo, me habían follado de maneras inmaginables y no
estaba muerta.
Pero
lo peor vino después cuando se corrieron encima mío, en mis pechos, en mi
rostro, un esperma caliente y asqueroso.
Eva
se levantó de su trono, esa mujer tan perfecta y desnuda chasqueo sus dedos y
uno de sus criados orcos me cogieron con mucha facilidad por las caderas, para
esos músculos pesaba como una pluma.
Nos
movimos por la mazmorra, hasta que lleguemos a una de las celdas y fui lanzada
dentro. Mi torturadora, la dama de las tinieblas me miro sonriendo:
-Allí
esta lo que estas buscando Selena.
Miré
la fina mano de Eva y vi que señalaba una pantalla de un ordenador que sobresalía
de una de las paredes de piedra.
Ella
al cerrar la puerta de la celda yo me fui acercando lentamente a esa pantalla,
me sentía agotada y dolorida, por las bacanales sexuales que habían sufrido mis
carnosas carnes.
La
toque lenta y nuevamente fui absorbida por esa pantalla, no sabia donde
terminaría, pero estaría mejor que aquella mazmorra.
Roberto
se levantó lentamente, había trabajado bastante el día anterior y tenía un día
de fiesta, sentía su cuerpo agotado y necesitaba descansar un poco, televisión,
café y el sofá.
Emma
se termino de duchar y fue a la cocina para preparar el café para los chicos,
cuando abrió el armario donde guardaba el paquete de nescafe, sintió una
presencia tras de ella y eso hizo que se girara lentamente.
Abrió
los ojos como platos al verme allí sentada en el sofá, yo Selena Gómez de
cuerpo exuberante apretado con ese vestido turquesa con un perfecto escote que presionaba
mis grandes tetas, la parte del trasero del vestido apretada y moldeaba mi
carnoso culo y se podía ver mis perfectas piernas.
Le
mire sonriendo con mis carnosos labios, tocándome mi perfecto y sedoso pelo.
Emma
me miro sorprendida y dijo:
-Roberto
tenemos visita……
Mi
compañero de piso salió de su cuarto y me vio frente de el:
-
¿Quién eres, eres amiga de Paul?
Yo
sonreír al escucharlos y los mire a los ojos:
-Sentaros
tengo que contaros una larga historia ya que soy una persona muy íntima de
Paul, podría decirse que somos la misma persona……
FIN.
No hay comentarios:
Publicar un comentario