Oscar negó con la cabeza al ver esos enormes pechos que se marcaban en la fina tela del pijama del hospital, se quedó atónita al ver aquello ¿Seguía jugando al mundo virtual, seguía en SexCity, seria aquello otra fantasía de la ciudad del sexo? Era lo más real que había vivido en su vida, no sabía si estaba en ese mundo virtual o se había transformado al final en Michumi.
Estaba asustada ya que tenía una vía en su vena, ese dolor era muy real, no podía creerlo, no quería creerlo. Hasta que una enfermera entro en la habitación, la nueva mujer asiática estaba llena de dudas, quería hacer miles de preguntas.
La enfermera de pelo rojizo y rostro aniñado plagado de pecas le miro con una agradable sonrisa en su rostro.
-¿Oscar, eres Oscar Solorzano?
La chica asiática asintió con la cabeza:
-Si, si...Pensaba que la transformación sería más lenta, que tendría tiempo en descubrir cómo no terminar transformándome en ella....
La enfermera asintió con la cabeza mirándole a los ojos:
-Eso es lo que les pasa a todos ¿Tuviste alguna relación sexual intensa en el mundo virtual?
Michumi trago saliva pensativa y asintió con la cabeza, el intento de encontrar a esas dos chicas entre expansiones le había cambiado totalmente la vida Michumi y Sumiku, se habían transformado en una obsesión para él o para ella.
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-Si estaba en SexCity, dándolo todo para comprar más expansiones para encontrar a unas amigas......
La enfermera asintió con la cabeza y le paso su mano por su frente mirándole a sus ojos rasgados:
- ¿Cómo te puedo llamar a hora Oscar?
La chica asiática suspiro:
-Michumi ... ¿A hora que voy a hacer?
La enfermera se fue alejando de su paciente y antes de atravesar la puerta le miro:
-Es una plaga que nadie puede parar, miles de personas cambias de físico, de sexo, te ayudaremos a adaptarte y tendrás que volver a comenzar de cero Michumi ....
Michumi comenzó su nueva vida en rehabilitación, cada mañana durante un mes estaba ahí, intentando aprender con un sobrepeso delantero, mover sus muslos tan carnosos, aprender a moverse con ese enorme culo, a lidiar con su poca estatura, aprender a usar ropa femenina y aprender a ponerse esos sujetadores de gran tamaño.
La joven asiática levanto su mirada en rehabilitación y pude ver hombres, mujeres de cuerpos increíblemente atractivos, de formas y tallas que llamaban mucho la atención, era los efectos secundarios de saciarse sexualmente con el mundo virtual en cualquier expansión, que hacía que sus cuerpos mutaran a sus avatares.
La chica respiro con calma con esa camiseta tan apretada por sus gigantescas tetas, con una marca de sudor y volvió a moverse por el lugar, intentando no marearse ni caerse de cabeza, tenía que aprender ser una nueva mujer.
Al salir de rehabilitación, la joven asiatica intentaba pasar desapercibida, ser una mujer mas y no llamar la atención de nadie. Llevando un vestido muy ajustado de su escote, era raro que tuvieran algo de su talla, la falda marcaba bastante su trasero. Eso de pasar desapercibida le costaría un poco mas y peor aun ya que se había atrevido a salir con unos tacones, no eran muy altos, pero eran complicados para ella.
Se paro frente a un rascacielos y pudo verse reflejada en una de sus brillantes ventanas, se miro y lanzo un largo suspiro "Soy a hora una mujer, una mujer española asiatica, con tetas mas grandes que mi cabeza" Lanzo un largo suspiro y vio tras de ella un viejo amigo del mundo virtual, la chica japonesa de tetas enormes se giro de golpe y le vio frente a ella.
- ¿Love?
El chico vestido de negro, con un traje de látex bastante apretado se acerco a su amiga, le acaricio su redondito rostro y sonrió:
-Vaya creo que te avise lo que te podía pasar ¿No es así y que haces aquí en Japón?
Michumi suspiro y miro a su amigo a los ojos, presionando sus enormes pechos, comparado a su amigo ella era bastante bajita, un retaco de 1,55:
-Trabajo en Japón y antes de entrar en la fabrica me puse las malditas gafas y me termine de transformas.......
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El desgarbado chico se acerco a su amiga y poso su mano en su hombro:
-Vamos a tomar un café y me cuentas lo que quieres hacer......
La chica asiatica cogió la taza con las dos manos y miro a Love, negó con la cabeza ya que tenia muchas ideas en la cabeza:
-Sera complicado volver a trabajar en la fabrica con un cuerpo como este, aun me sigue pesando la delantera, mi culo es enorme para darme prisa......
Su amigo asintió con la cabeza:
- ¿Has pensado hacerte una profesional del mundo virtual? Se gana bastante y se folla mucho ¿Por qué entraste la primera vez? Creo que me lo contaste....
La chica asiatica abrió los ojos como platos, lo que podía con esos ojos tan rasgador:
-Si, si quería encontrar a dos chicas...Las podría seguir buscando y ganas muchas monedas, tengo un cuerpo para eso, aparte podría buscar una cura para volver a ser Oscar.
Love sonrió mirando a su voluptuosa amiga asiatica, por su mente paso la mejor forma para poder ayudarle, hacia años que eso del mundo virtual lo había convertido en un negocio, tan bien le había salido la jugada que su cuerpo se había convertido como el de su avatar.
-Si quieres puedo encargarte de ti, hay mucha gente que conozco que han convertido el mundo virtual en un negocio, me haría cargo de ti, ganando algo para mí y ayudándote para que consigas lo que quieres......
Michumi asintió con su cabecita:
-Si, si....
Love se levanto de la mesa y se acerco a su amiga, acariciando su rostro redondito:
-Viajemos a donde vivo, Holanda...
Un antiguo hotel, reconvertido para los jugadores del mundo virtual, donde cada uno hacia lo que quería, sacando bastante dinero, nadie se metía en tus negocios y tu podías hacer lo que querías, mientras que no te pillara la policía.
El chico miro a su amiga, había hecho un gran trabajo con la japonesa de tetas grandes. Michumi estaba colgada del techo con cadenas, estaba a un metro del suelo, totalmente desnuda, con los cascos de realidad virtual puestos, con un tubo alimentándolo de papilla, algo que no tuviera que masticar y que rápidamente entrara por su garganta alimentándola, un tubo metido en su ano para que hiciera sus necesidades y otro para su orina. Encima de su cabeza tenía un contador electrónico con las monedas que estaba consiguiendo.
En SexCity, en una habitación llena de colores chillones, con luces de neón rodeando toda la cama, con un increíble paisaje, donde se podían ver miles de edificios, edificios donde cada planta, había sexo, sexo de toda clase, donde miles de hombres, mujeres, futanari, furris y otras perversiones atendían a sus clientes.
Michumi hacia una felación a un hombre delgaducho llamado Frier con una enorme polla, que, seguro que era una expansión cibernética, comprada en la tienda virtual y le hacia una paja a una mujer, delgaducha y de pelo rosa, llena de tatuajes llamada Trier, con una enorme polla, que la chica asiatica se iba turnando, metiéndose pollas en la boca.
La asiatica se fue metiendo esas enorme polla de Frier por su ano, haciendo que este le cogiera de la cintura y de sus grandes tetas, mientras que Trier le cogió de la cintura y comenzó a penetrar su vagina, la chica con polla se tumbo encima de esta pagando sus pequeños pechos contra los enormes pechos de Michumi y estaba fue penetrada analmente y vaginalmente.
Hasta que la chica asiatica abrió la boca para recibir todo el semen de sus pelotas en el rostro, les miro con la boca cerrada, tragando su semen y vio como se acumulaba mas monedas en el contador que estaba encima de su cabeza.
La chica asiatica se levanto de la cama cuando se quedo a solas y rápidamente su cuerpo se seco de sudor, se limpio de semen ya estaba preparada para todo, no llegaba a pensar en la razón por que tenia tanta energía, sin saber que era alimentada en el mundo real.
Se paso el pintalabios por sus labios y vio como se abrió la puerta de su habitación, volvería a tener mas clientes, pero esta vez la sorpresa fue mayúscula aparecieron por su puerta Timiku y Sumiku
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