El detective Jack Murray se movía en su despacho bastante enfadado, tirando sus cosas de la mesa, estaba cabreado con todo ya que “El Toro” Se volvía a escapar de la cárcel, su investigación durante años se había perdido, solo por falta de pruebas, no fueron bastantes las que había reunido.
El hombre de unos cincuenta años, de barba
pronunciada y de unos cuantos kilos de más cogió su chaqueta y prefirió salir
de la comisaria para emborracharse, olvidar todo lo que había pasado, tenia que
beber mucho para olvidar su fracaso:
-¡¡¡JOOODER!!!
El peor bar de la ciudad, con la música más atronadora
y donde podrías desaparecer por unas horas, la policía nunca se pasaba por la
zona y había libertad para coger grandes borracheras.
allí Jack se sentó en una mesa y se comenzó a
emborrachar con el peor whisky que tenían, quería olvidar todo lo que había
pasado los últimos meses. Hasta que en el bar entro una jovencita, pelo castaño
oscuro, delgaducha con pocas curvas y con gafas, parecía una repelente
estudiante que se había perdido al ir al instituto, la chica estaba buscando a
alguien, hasta que lo vio allí frente de ella:
-Hola soy Miley Carter es usted el detective Jack
Murray-Dijo la chica.
El detective suspiro al ver a la joven que
tenia delante, le dio un trago a su copa y volvió a llenarse el vaso, no quería
ni necesitaba compañía:
- ¿Qué quieres, no ves que me estoy emborrachando?
Miley suspiro y se sentó a su lado, el
cochambroso hombre negó con la cabeza, solo esperando que su olor corporal hiciera
que la chica se fuera, que le dejara tranquilo, pero la chica quería
intentarlo, quería hablar con el:
-Se que quería coger a “El toro” yo puedo
conseguirlo, puedo conseguir que pueda estar tan cerca de él, podrá llegar a
meterse en su casa, hasta en su cama y lo podrá encerrar……
Jack le miro enfadado, pensando que era una
broma:
-lárgate.
La chica se levanto y le dio una tarjeta:
-Esta noche a partir de las 4 de la mañana
tendrá una chofer esperándole en la puerta y si le interesa pillar “El toro
“ella le llevará a mi laboratorio.
Cuando el detective termino su botella de
whisky se levantó tambaleándose e intento salir del bar, miro la tarjeta que le
había dado la jovencita, al salir se encontró a una mujer de físico musculado,
pelo oscuro corto, camiseta de tirantes con manchas de grasa y de sangre de
alguna pelea, brazos llenos de tatuajes y mirada seria.
Sonrió al ver a Jack:
- ¿Qué Jack tendrás cojones de dejarte ayudar
por Miley?
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